Tienes tres maneras de construir tu cartera de inversión, una cartera pasiva, una cartera activa, y un mix de las dos primeras.
Existen básicamente dos tipos de inversores, los que creen que no se puede predecir los rendimientos futuros y los que sí.
El primer grupo de inversores creen en la teoría de que el mercado es eficiente, y por tanto, que no se puede batir el mercado. Creen que no podemos predecir los retornos ajustados al riesgo que podemos obtener.
Hay otro grupo que cree que el mercado es ineficiente y con una o varias estrategias de inversión trata de batir año tras año el mercado. Este inversor cree que puede predecir los retornos ajustados al riesgo de alguna manera.
Estas dos formas de pensar son clave a la hora de invertir y harán que cada inversor opte por construir un tipo de cartera diferente.
También habrá inversores que no serán tan radicales en su creencia y optarán de alguna manera invertir de acuerdo con las dos creencias dominantes, ponderando más o menos, la opción en la que crean más.
Como puedes ver, todo depende de tus creencias, y yo diría también de los conocimientos personales.
Tres maneras para construir una cartera de inversión
Construir una cartera de inversión si como inversor crees que no se puede batir el mercado
Estos inversores creen que no se pueden predecir los retornos ajustados al riesgo. Están asumiendo que todos los activos dan el mismo rendimiento ajustado a riesgo.
Es por ello que invierten igual que los mercados, es decir, invierten en los índices ponderados por capitalización. Se indexan.
Esto lo pueden hacer de varias maneras:
1 Mediante una cartera de Fondos de inversión pasivos
Esta forma no es buena, ya que las comisiones por este tipo de gestión no tienen sentido. Pero hay inversores que incluso contratan servicios de gestión de carteras para que les digan qué fondos incorporar y cómo ponderar.
2 Mediante robo advisors
Los inversores que conocen los ETFs saben que son mejores que los fondos en cuanto a comisiones, pero como no saben crear una cartera ni saben hacer el mantenimiento de las ponderaciones obtiene para contratar el servicio de un robo advisor.
3 Mediante una cartera de ETFs
Un tercer grupo opta por diseñar, y reequilibrar la cartera de ETFs ellos mismos.
Entienden que les robo advisors están mal diversificados, cobran de manera excesiva por el servicio que dan, y no escogen los mejores ETFs o los que le gustaría tener el inversor.
Construir una cartera de inversión si como inversor crees que se puede batir el mercado
Hay un segundo tipo de inversor que cree que se pueden batir los índices bursátiles. Por lo tanto, cree que se pueden predecir los retornos ajustados al riesgo.
Son conocedores de estrategias de inversión y de los factores que se pueden explotar del mercado para sacar rendimientos.
Aquí hay una guerra abierta sobre maneras de gestionar activamente. Los defensores acérrimos de cada tipo se comportan como talibanes.
Han puesto tantos años y recursos a entender, estudiar y desarrollar su estrategia de inversión que cualquier otra forma que produzca mejores rendimientos es un ataque a su ego.
La verdad es que todas las formas de gestionar pueden producir buenos rendimientos. Jim Simons en gestión cuantitativa algorítmica es el mejor inversor de la historia componente a tasas por encima del 60% anual.
Soros a tasas del 40% haciendo global macro, o Buffet a tasas del 20% haciendo value, todos son ejemplos de tres maneras de invertir totalmente diferentes con unos éxitos indiscutibles.
En España la mayoría piensa que sólo hay una manera de invertir, explotando el factor valor en acciones.
La industria en España se ha cerrado y protegido de la injerencia externa que ofrece otras formas de gestionar, lo que ha hecho que no haya competencia en la gestión, lo que a su vez ha hecho que la industria haya caído en la mediocridad y autocomplacencia.
El inversor de gestión activa en España tiene pocas estrategias para escoger de calidad. Sólo una, la inversión en valor, y que como ya sabes, pocos saben explotar.
Este segundo tipo de inversor puede invertir de tres maneras.
1 Invirtiendo vía Fondos de inversión activa
Un primer grupo de inversores que cree en la gestión activa de acuerdo con uno o varios factores o estrategias a explotar, invierte vía fondos de inversión.
Es la manera de invertir más cara por las comisiones que implica.
2 Invirtiendo vía ETFs Smart Beta
Muchos inversores viendo los resultados de los fondos de gestión activa, más del 85% no supera los índices de referencia, y las altas comisiones, buscan versiones más económicas de gestión activa.
Mediante la versión barata de gestión activa, llamada Smart Beta, se trata de batir los índices invirtiendo ponderando de manera diferente a como lo hacen los índices (por capitalización), y explotando factores (estrategias reconocidas por la industria, ya sea valor, momentum, talla, etc.)
3 Seleccionando acciones por su cuenta
Existe un tercer tipo de inversor, que opta por la vía de la compra directa de acciones.
Los que tienen grandes patrimonios pueden optar por delegar la gestión de la cartera de acciones a Empresas de Servicios de Inversión, no para tener más rendimiento, sino porque quizás se sienten más tranquilos.
Los que no tienen tanto patrimonio y por tanto no pueden acceder a este servicio de gestión de carteras, hacen su selección, normalmente centrándose sólo en su país.
La industria le ha vendido que esto de batir los índices es muy difícil y el pobre inversor sin conocimientos se lo ha creído. Pero la verdad es que una selección aleatoria de acciones puede dar unos resultados que pocos esperan o conocen.
Como inversor no tienes una postura definida sobre la eficiencia del mercado
Estos inversores no son fieles a ningún tipo de pensamiento. Diversifican creando una cartera de ETFs de gestión pasiva en una parte de su patrimonio, y con una cartera de gestión activa que invierte en diferentes estrategias de inversión, y sobre todo, activos.
Me refiero a commodities, energía, tipo interés, metales, etc, no sólo acciones.
Se puede hacer mediante una cartera de ETFs si no eres español, ya que a los españoles no se les permite invertir en ETFs americanos.
También se puede hacer una cartera de fondos inversión si buscas fuera España y tienes conocimientos de lo que haces.
Además, como no, estos inversores no renuncian a hacer su «stock picking» y compran su cartera de acciones que incorporan a su estructura global.
Como ves hemos pasado del inversor sin conocimientos a inversores más avanzados.
Se necesitan ya conocimientos avanzados de modelos de gestión, tipos de estrategias, y de ponderación de activos. Como dice Buffet, si no sabes lo que haces mejor comprar un índice.
Conclusión
El asesoramiento en España es para los que pagan y tienen capital. Para el resto es directamente una tomadura de pelo.
El tratamiento fiscal en España de los ETFs es como una acción, o sea igual de malo. Si invierto vía fondo tengo un tratamiento favorable, si lo hago directamente vía ETF o acción, no.
Espero que veas como la industria ha montado un corralito que te lleva al matadero. O sea a comprar sus fondos mediocres.
La banca que es quien lo controla todo, no le interesa que te gestiones tú la cartera, ni que puedas comprar buenos ETFs en Estados Unidos, le interesa que les compres sus fondos mediocres.
Gobiernos arrodillados ante la banca, proteccionismo hacia injerencias exteriores, no fomentar la cultura financiera de la población, todo hace que los modelos de gestión para el inversor retail sean una vergüenza.
Sólo aquellos gestores independientes que han seguido perfeccionándose y aprendiendo por su cuenta pueden ofrecer una gestión de calidad.
Sólo los inversores que tengan voluntad de aprender a construir y mantener su cartera de inversión, o han encontrado estos gestores inconformistas, pueden escapar de esta trampa mortal.
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