Lo que acaba definiendo tu filosofía de inversión es tu personalidad, tus fortalezas y debilidades personales, y como te defines como inversor, o sea,
- la rentabilidad que buscas,
- la tolerancia al riesgo que tienes,
- la cantidad de capital a invertir de que dispones,
- el horizonte temporal de la inversión,
- y como acabarás tributando por los beneficios.
Esta filosofía de inversión será la base sobre la que construirás tu manera de invertir, o sea, tu proceso inversor. Es por ello que es de gran importancia.
Si te gestionas tú las inversiones debes tener una filosofía clara que vaya con tu manera de entender los mercados.
Si delegas a alguien el proceso inversor, tienes que conocer bien la filosofía de este, ya que tienes que alinear tu filosofía con la suya.
Si no lo haces, corres el peligro de no soportar el proceso y abandonar la estrategia en el peor momento posible.
Desde mi punto de vista las principales filosofías de inversión son:
1 Filosofía de inversión Pasiva
Este inversor o gestor no cree en que se pueda batir los índices de referencia. Cree que los mercados son eficientes.
Su aproximación será la de comprar y esperar a que con el tiempo la creación de riqueza por parte de las empresas haga su trabajo.
2 Filosofía de inversión Fundamental
Estos inversores o gestores creen ya en una gestión activa.
Analizan los datos fundamentales de las empresas para invertir en aquellas que creen tienen los mejores ratios.
Es la clásica que se estudia en las escuelas y la más antigua.
3 Filosofía Técnica
Es la filosofía de inversión que cree que todo lo que se puede saber ya está descontado en el precio actual.
Por tanto mediante diferentes métodos analiza la evolución del precio para tomar las acciones adecuadas.
La propaganda por parte interesadas ha hecho que esta filosofía sea la puerta de entrada para muchos inversores amateurs.
Al tener muchos métodos de dudosa utilidad suele estar muy mal vista.
4 Filosofía de inversión Cuantitativa
Utilizada con la llegada de la computación. Se utiliza por las tres anteriores con diferentes propósitos.
Por ejemplo, para seguir un índice en la pasiva, analizar sistemáticamente los ratios fundamentales de las empresas en la fundamental, o para cuantificar indicadores técnicos basados en el precio con algoritmos de creación propia, en la técnica.
¿Cuáles son tus fortalezas? Entiendes los ratios empresariales? ¿Sabes programar? Tienes una base científica? ¿O crees que los mercados son eficientes? Deja tu comentario.
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